martes, 13 de abril de 2010

Escuchar y Actuar. (A Dios orando y con el mazo dando)

Escuchar y actuar.

“Si alguien les dice: –Consulten a las pitonisas y a los agoreros que susurran y musitan; ¿acaso no es deber de un pueblo consultar a sus dioses y a los muertos, a favor de los vivos?–, Yo les digo: ¡Aténganse a la ley y al testimonio! Para quienes no se atengan a esto, no habrá amanecer.” Isaías 8:19-20

En muchas ocasiones tenemos la gran tentación de consultar con agoreros acerca de nuestra vida y de nuestras circunstancias. Y tratamos de justificar nuestra decisión, tal como dice el pasaje que leímos. Sin embargo es muy reconfortante saber que la Biblia ofrece un camino mejor.

Dios sabe que el hombre necesita saber acerca de su vida y de sus circunstancias. Y Dios mismo ofrece la solución. Dice en este pasaje: ¡a la ley y al testimonio! Lo que quiere decir en otras palabras a escuchar y poner en práctica. La Ley en esta frase se refiere a toda la Santa Escritura y testimonio se refiere a dar testimonio de que creemos en la Biblia, poniéndola en práctica.

A la ley = Escuchar La Palabra
Al Testimonio = Poner en práctica lo que escuchaste

En otras ocasiones hemos estudiado lo importante que es escuchar y hacer. Hemos aprendido que es una forma de proteger nuestras vidas y nuestros proyectos. Pero ahora vamos a estudiar que también Dios ofrece otra ventaja. Ofrece que tengas un entendimiento y comprensión de tu vida y de tus circunstancias. Dice al final de este pasaje: “Para quienes no se atengan a esto, no habrá amanecer”.

Amanecer aquí lo podemos interpretar como entendimiento de las cosas, como una luz que te aclara el panorama o como decimos en México “que te cae el veinte”. Es un momento en el cual entiendes las cosas. Entiendes tu vida, entiendes tus circunstancias. Es un momento de lucidez en el cual puedes captar e interpretar claramente alguna situación en tu vida.

No sólo eso, implica también un nuevo horizonte. Un nuevo día. Esperanza. Al ver con la Luz de Dios nuestra vida también podemos ver el consejo de Dios para nosotros. Podemos ver su guianza y su mano encaminándonos por el sendero correcto.

Es cierto, el mundo siempre te va a ofrecer el camino de los agoreros, pero si tú crees verdaderamente en Dios, confía en los elementos que Él mismo ha provisto para nuestra vida. En este caso; Escucha su Palabra y ponla en práctica. ¡a la ley y al testimonio!

Armando Carrasco Z.

No hay comentarios: