sábado, 29 de septiembre de 2007

Ubicación rápida de los libros de la Biblia.

Hay un sistema muy sencillo para ubicar los libros de la Biblia rápidamente.

El contenido completo de los libros de la Biblia se puede dividir en 5 partes cada Testamento o Pacto.

En el antiguo Pacto o Testamento se puede dividir en:

1. Pentateuco o Libros de la Ley
2. Históricos
3. Poéticos
4. Profetas Mayores
5. Profetas Menores

Ahora con tu mano, en cada dedo ubicas un tema.



En el Nuevo Pacto o Testamento se puede dividir en:

1. Evangelios
2. Histórico
3. Epístolas Paulinas (escritas por Pablo)
4. Epístolas Generales (escritas por los otros apóstoles)
5. Profético

Ahora con tu mano, en cada dedo ubicas un tema.



Cada concepto tiene uno o más libros. Cuando empezamos a leer la biblia es más fácil si nos aprendemos esta sencilla división para localizar rapidamente un libro, sólo tenemos que ubicar en que rango está el libro buscado y por lo menos sabemos por dónde esta localizado.

Claro que implica memorizar o por lo menos ubicar cada libro de la Biblia.

Ejemplo: buscar Isaías 55:2 lo primero que hacemos es ubicar:

- En qué Testamento está. Una vez que que sabemos que está en el Antiguo Testamento:
- En qué división se encuentra. Una vez que sabemos que está en profetas mayores podemos aproximadamente saber el lugar donde está ubicado.

Una vez que lo dominamos lo haremos en automático.

El contenido completo de la Biblia lo puedes encontrar aquí.

Armando Carrasco Z.

sábado, 22 de septiembre de 2007

La Biblia; la mejor guía en la vida.

El libro de los Salmos es en lo particular muy apreciado por su riqueza para entender muchas de las cualidades de Dios desde un punto de vista humano. En los Salmos vemos las grandeza de Dios pero vemos también la gran necesidad humana.

En los Salmos no vemos a los hombres de Dios como hombres extraordinarios, al contrario vemos que eran hombres con las mismas necesidades internas que las de nosotros. Por eso es que siempre recomiendo leer los Salmos continuamente.

Hoy medité en un versículo del libro de los Salmos, el 119, versículo 105 que dice: “Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino.”

En otras palabras la Biblia es una lámpara que va alumbrando nuestros caminos. Cuando somos asiudos lectores de ella, nos va mostrando el camino. Esto provoca un sentimiento de seguridad, es exáctamente como cuando se va la luz que no vemos nada y nos vamos tropezando con todo, pero al momento de prender una lámpara podemos ver por dónde caminar.

Igual nos pasa en la vida, a veces las circunstancias adversas oscurecen nuestro camino y no vemos por dónde seguir. Es allí donde necesitamos alumbrar los senderos de nuestra vida con la Biblia.

Ese libro que muchas veces tenemos de adorno tiene la precisosa cualidad de guiar nuestros pasos y nuestras decisiones. Bájala del librero, y haz el hábito de leerla de manera consistente. Te vas a llevar una agradable sorpresa, te va a guiar de la mano alumbrando tu camino.

Hay una respuesta para cada necesidad.

No importa que tan oscuro esté tu camino, no importa qué tan negro sea el panorama en tu vida, la Biblia tiene la capacidad de mostrarte el camino.

Armando Carrasco Z.

martes, 18 de septiembre de 2007

La Biblia está viva.

Es un libro exageradamente curioso. Es un libro que cobra vida cada vez que la lees. Puedes haberla leido muchas veces, es más puedes haber leído muches veces un solo pasaje, pero un día lo vuelves a leer y con ese mismo versículo descubres otras cosas de Dios o de tu propia vida.

Eso nos da una idea de que la Bibllia es eterna. Tiene una tecnolgía que hombre desconoce, una tecnología que cuando se activa descubre al hombre y le alumbra el camino, esté donde esté, en el año que sea, en la edad que sea y cual sea su situación.

Tiene algo así como microchips que detectan al lector lo escanean y le muestran lo que necesita.

Lo mismo sirvió la Biblia para el hombre que la leyó hace mil años que sirve para el que la lee en nuestros días. Las necesidades del hombre son las mismas. Y la Biblia le tiene todas las respuestas que necesita para su diario vivir.

Tal pareciera que la Biblia nos “ve” y sabe de nosotros que cuando la leemos nos tiene el oprotuno socorro.

Esa es la razón por la que no podemos tener a nuestra Biblia sólo de adorno. Es necesario que la bajemos de aquel nicho que le hicimos solo para tenerla de adorno y que empezamos a estudiarla y meditarla.

Así como diario encuentras en tu mesa el pan diario, asi mismo Dios tiene para ti alimento divino todos los días. Si todos los días buscas el pan diario, el alimento que te aliente, la palabra que te guía, seguro todos los días encuentras la respuesta.

La Biblia está viva, es Su Palabra.

Armando Carrasco Z.

jueves, 13 de septiembre de 2007

La Verdad te hará libre.

Cuánto se ha usado este versículo. Hasta para esólganes de unviersidades e institutos.

Creo que se ha usado tanto que ha perdido su impacto. Hoy leemos esa frase como una más de la oferta informativa de todos los días.

Dice la Biblia en Juan 8:31-36

“Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre. Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.”

Hay algunos datos que debemos tomar en cuenta para saber exactamente a qué se refería Jesús y los alcances de poder que tiene este versículo tan citado.

En primer lugar vemos que se dirigía a todos aquellos que habían creído en Él y menciona dos puntos importantes por ser sus discípulos:

a) “...si ustedes permanecen en mi Palabra seréis verdaderamente mis discípulos...”. Lo primero que está diciendo es que para ser discípulo de Jesucristo es necesario permanecer en Su Palabra.
b) “...y conoceréis la verdad , y la verdad os hará libres...” Necesitamos ser discípulos de Jesús para poder conocer la Verdad y ser libres.

Pero debemos notar también de qué nos hace libres. En la siguiente parte de este pasaje dice que la gente le respondió:

“…Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado…”

La verdad a la que se refería Jesús, no era una verdad de alguna filosofía de su tiempo, ni era la frase publictaria del momento. Era la verdad absoluta. Era Él mismo revelándose. Era La Palabra de Dios.

Y nos hace libres del pecado. Y nos hace hijos. Dice en la parte final del versículo:

“Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre.”

Cuando la verdad de Dios, su Palabra, te hace libre te convierte en hijo y vives para siempre en Su casa. Es del pecado que la verdad te hace libre.

Y termina confirmando que Cristo es la Palabra de Dios hecha carne dicendo:

“Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.”

Él es el único que puede darnos libertad total en nuestras vidas. Es la verdad contenida en Su Palabra la que nos hace libres.

Por eso te invito a que busques todos los días aunque sea unpoco de esas verdades contenidas en la biblia y dejes que te liberen.

Armando Carrasco Z.